sábado, 16 de noviembre de 2024

Tan pequeña

                           “Nos toca aprender a perdonarse recaídas

                            y abrazarme muy fuerte y recordar que soy mi amiga

                            y que si no fuera por mi, ¿por quién sería?”

                                                                   -Belen Aguilera


Me hicieron tan pequeña que no aprendí a caminar,

tan cerca del suelo que para qué me iba a levantar.

Siempre mirando arriba por si me podían pisar. 


Aprendí a gritar para que nadie escuchara.

Aprendí a saltar para que nadie mirara.

Aprendí a tirarme la cuerda para que nadie se preocupara.


Me hicieron tan pequeña que las únicas manos con las que contaba eran las mías, 

aunque nunca sintiera la fuerza para usarlas.

Siempre huyendo del amor porque solo lastimaba.


Construí en la soledad mi casa, en el silencio mi presencia y en el miedo mi destino.


Me hicieron tan pequeña que ni siquiera pude comprobar si existo,

me escondí en la ausencia de ruido.

Siempre pisando sobre aire por si podía molestar.


Crecí pensando que nunca rellenaría el hueco.


Y es que si no hay superficie,

¿cómo vas a aprender a andar?

Y es que si nadie te ve,

¿quién te puede enseñar?

sábado, 3 de agosto de 2024

Suficiente

Si tuviese algo que decir que no matase al idioma,
si tan solo mis palabras pesaran más que mi lápiz,
si este texto no humillase a los cerdos,
si valiese más que nada,
¿qué cambiaría?
Quizá el olor de la pérdida a sal,
el terremoto diario que supone respirar,
mi nombre.

Soy el residuo en el pantano que olvidaron retirar.
Soy la presa del león que olvidaron jubilar.
Soy el títere de cuerdas rotas que olvidaron arreglar.

Siempre cerca de la estrella para recordar el final.

Cuántos platos tengo que romper para curarme las heridas. 
Cuántas puertas debo abrir para llegar a casa.
Cuántas veces tengo que cerrar los ojos para sentir el peso de mis zapatos.

Si tan solo…
suficiente.

domingo, 1 de octubre de 2023

Aeropuerto

                      “ Que siempre te querré aunque no te tenga

                      que siempre me tendrá’ aunque no me quiera’”

                                                          -Como un G (Rosalia)


Hace un siglo que hablar me rompe la voz,

que hay lugares que ya nunca nombro,

que hay animales que ya nunca me hacen reir,

que no llega la risa porque no puedo contar la broma.


Hace un siglo que me comió el miedo,

que tuve que parar de andar para no caerme,

que me paralizó la pérdida,

que le pregunto a nadie cada día como estás.


Hace un siglo que llevo tu nombre de mochila,

que soy las preguntas sin respuesta,

que soy el problema y la culpa en esa estación,

que soy el dolor que me obligó a marcharme.


Parece que fue hace un siglo

cuando se rompió el reloj que contabilizaba las horas.

Aun es ayer,

o eso dicen todos los domingos

que ya no te ven atardecer.

lunes, 7 de agosto de 2023

El resurgir de nada

                                                   “Mi madre ha muerto, 

                                                    y ahora todo es peor.”

                                                              -Bojack Horseman

Es esta noria que nunca deja de girar,

es la sangre en el suelo de aquel pub

que lo tiñe todo ámbar. 


Es empujar la pared cada vez con menos fuerza,

tropezar, golpearte la cabeza y caer,

seguir empujando.


Es la realidad que aprieta,

que mastica tus dientes para que no puedas tragar.


Es recibir el golpe sin devolverlo.

Es recibir el golpe y pedir perdón.


Es no saber lo que podrías ser si tuvieras alas,

si alejaran de ti la hoja que corta el aire que te impide respirar.


Es saber que solo acabará cuando acabe

y mientras,

a desesperar.


Es el aguijón de la avispa muerta

que pisas por confiar.


Es mi gozo en el pozo de cualquier bar

que lleve tu nombre.

domingo, 19 de septiembre de 2021

Aquí te espero

Hay trenes que solo pasan una vez en la vida,
aunque tengamos la capacidad de verlos circular todos los días bajo nuestra puerta.

Son trenes que se te hacen tan familiares
que es sorprendentemente complicado reconocerlos,
siempre camuflados en la felicidad fácil que transportan
y la seguridad de que podrás verlos cerca de ti.

Es tan difícil dar el paso para montarte en un vagón,
te tiemblan tanto los pies mientras te agarras a la barra
que solo rezas para que no se te haga tarde
y se vaya.

Nunca fui muy rápida,
y se me ha ido
en la cara.

Ahora solo quedo yo, 
mirando a la nada, abatida,
con un pie y un brazo en el aire,
sin bajarlos por si vuelve a buscarme.

sábado, 26 de septiembre de 2020

En contra del viento.

                                                    "No te culpo de mi pena, 
                                                     no te culpo de mi mal, 
                                                    te construiré un castillo 
                                                    con tus lágrimas de sal. 
                                                    (...)
                                                    Déjame que te proteja
                                                    de lo que pueda pasar."
                                                        -Natalia Lacunza & Guitarricadelafuente
                                                            


La lucha del no,
el eco de las palabras que nunca podré decirte,
las miradas que nunca escucharemos,
las ganas que nunca le pondrás.

Es como saber que se acaba el invierno
y no ha existido la navidad.
Es como ver la lluvia caer
siempre desde abajo.
Es como gritar hasta rajarse
los labios.
Es como si no me quisieras.

Soy un mimo
que mueve las manos tras el cristal
a la espera de que busques sus señales.
Soy un mimo triste
que no asume 
que no las buscarás.

Ojalá todo fuese un sueño,
y tú me despertaras.




domingo, 20 de septiembre de 2020

Antes de que todo cambie

                                      “Yo estaré sin ti,

                                       y tú estarás mejor.” 

                                                -Andrés Suárez


Cuando todo se vuelva gris

y los pájaros naden

y no sepan dónde volver,

llámame.


Cuando te tiemblen los párpados

de mirar hacia abajo

y no sepas qué era andar con la cabeza alta,

llámame.


Cuando te pesen los pies

de llevar tus cadenas

y no sepas quién quieres ser,

llámame.


Cuando estés triste por no recordar quién eres,

ni haya manera de reconocerte en un espejo,

ni sepas de tus virtudes,

llámame.


Llámame,

y te contaré lo que eres,

y te lo diré con mis ojos.