jueves, 19 de enero de 2017

Los payasos de mi cama.

                                       "Quiero bajar de la cruz."
                                                       Kase O

Oigo a tanta gente reir a mi alrededor que me produce lástima. Caen mis lágrimas al ritmo de ja, ja, ja. No cesan, no dejan de reirse en mi cabeza, quizás es por mí, porque me da pena. Lo escribo.

Ahora todos son payasos, y rien, y rien, y hacen reir. Yo me callo, soy un silencio que llora. Me preguntan si estoy triste, como si se le pudiesen quitar los colores al arcoiris. Yo respondo que no estoy triste, que son ellos los que rien demasiado. Lo escribo.

De repente, un folio. Se posa delante de mi cara, llevan razón. Unas letras grandes y negras:

Escribes para no matarte.

Y un sello:

Un arcoiris en blanco y negro.

domingo, 15 de enero de 2017

Superdotada emocional fracasada.

            "Todos los días son el día más triste de mi vida."
                                             Irene X

Estoy cambiando tan rápidamente. Lo siento.

Lo siento en la música que escucho, ahora duele de forma diferente, como ese momento en que te rompes algo, esa fracción de segundo en la que no duele nada porque duele todo.

Lo siento en el aire que respiro, entrecortado, sigiloso, revuelto, desbocado. Me recuerda a un niño apunto de dar su primer beso.

Lo siento en mis facciones, menos arrugadas que antes, más infelices. En mis pies, más hinchados, menos agrietados. En mi cuerpo, más golpeado, menos deseado.

Lo siento en mi voz, muerta por una calada que no he dado, como ese envoltorio de caramelo que te encuentras en la calle y está vacío.

Lo siento en mi alrededor. Cada vez más ausente, más solo, más desagradable, más callado, más egoísta, más borde, yo, claro, mi alrededor ni siquiera se da cuenta de que existo.

Lo siento en la paz que no me reconforta, en la espada que no me atraviesa la boca, en el lecho que no he construído, en la avispa que no se posa en mi nariz.

Lo siento, pero, sobre todo, lo siento por mí.

viernes, 13 de enero de 2017

Serpiente.

                                "Cuando notas que hasta la lluvia
                                  te esquiva al andar."
                                                         Kaze
Voy haciendo eses,
y no es culpa
del alcohol ni
de las vueltas que daba de niña.

Voy haciendo eses:
S.(O).S.
Socorro es lo que grito
cuando sé que nadie puede oirme,
cuando hay luna llena
y ahuyento a mis lobos.

Voy haciendo eses:
Ssssss(hhhh).
Silencio es lo que pido
cuando no dejo de oirme,
cuando empieza a sonar mi canción favorita,
esa
que ensuciaron otros.

Voy haciendo eses
porque ahora soy
una serpiente,
de sangre fría,
colmillos largos,
ojos amarillos
y veneno.

Oh, cómo me gusta el veneno.

Ese que produce tal dolor
que acaban arrancándose la piel
a tiras,
ese que penetra haciendo azules sus arterias.
Y los gritos...

Oh, cómo me gustan los gritos.

Aunque sean míos.

sábado, 7 de enero de 2017

Arañazos.

                                "Como ese trocito de piel
                                 que nadie se da cuenta
                                 de que se lleva."
                                                         Irene X

Puedo sentir el dolor
en un cuerpo parecido a éste,
que no es éste,
ni será aquel,
aunque sea éste.

Todas las canciones tienen letra,
y así no puedo concentrarme en la música.

Lo que separa este cuerpo
de todas las canciones, 
son las veces que me he quedado callada
cuando me han herido,
son las veces que me he quedado callada
mientras lloraba.

Por lo demás,
todo lo que queda de mí
son historias,
nada de sentido al recordarlas
y náuseas para fabricar otras.

Sólo quedan las marcas,
cicatrices,
arañazos,
de un pasado que se hizo
la canción más triste del mundo
y que enseñó al presente
a empuñar el arma
que ha dejado mi vida sorda,
y mi futuro,
silenciado.